Este sábado, los militares de la 18 Zona Militar se convirtieron en héroes de las calles al ejecutar el plan DN-III, tras las intensas lluvias que azotaron la capital hidalguense.
La tormenta no solo trajo consigo una gran cantidad de agua, sino que también colapsó el sistema de drenaje, provocando inundaciones en varias calles, principalmente del sur de la ciudad, dejando a varios vehículos y sus conductores varados.
Con la precisión de un reloj suizo, el personal militar se desplegó rápidamente para llevar a cabo una serie de actividades cruciales. Primero, se encargaron del rescate de los conductores y vehículos atrapados.
Tras garantizar la seguridad de las personas, los militares se arremangaron y se pusieron manos a la obra para desazolvar el sistema de drenaje de aguas pluviales. No contentos con eso, también implementaron medidas de abanderamiento y control de tránsito, asegurándose de que no hubiera percances carreteros adicionales.
Afortunadamente, según el informe de la 18 Zona Militar, no se reportaron personas lesionadas por estos hechos.