La unidad de rescate, rehabilitación y reubicación de fauna silvestre de Pachuca informó recientemente un notable acto heroico: el cuerpo de bomberos del estado de Hidalgo rescató a dos hermanitos cacomixtles. Estos diminutos y encantadores mamíferos fueron encontrados vagando en una colonia de Pachuca, desatando un operativo de rescate digno de cualquier película de aventuras.
Revisión y rehabilitación
Después de ser salvaguardados, los pequeños cacomixtles fueron revisados y valorados por la unidad especializada para verificar su estado físico y médico. Es reconfortante saber que el bienestar de estos animales está en buenas manos, pues su conservación es crucial para el equilibrio ecológico.
¿Qué es un cacomixtle?
Los cacomixtles, también conocidos como basariscos, son pequeños mamíferos omnívoros de la familia Procyonidae, la misma a la que pertenece el mapache. Su nombre en náhuatl, tlacomiztli, significa “mitad gato”—lo que los hace casi felinos honorarios. Aunque son principalmente nocturnos y bastante tímidos, se les ha visto merodeando por el Valle del Mezquital y la Comarca Minera en los últimos años.
A ellos les gusta una dieta variada que incluye chapulines, escarabajos, ratones y frutos de varias plantas, y desempeñan un papel vital en la reforestación del bosque.
La importancia de proteger al cacomixtle
El cacomixtle es principalmente solitario y tiene unos cuantos depredadores naturales como búhos, zorros, coyotes, mapaches y linces. En la adultez, estos mamíferos prefieren marcar su territorio discretamente por la noche.
La contribución ecológica que hacen, especialmente en términos de dispersión de semillas, convierte a estos animales en guardianes no tan ocultos de nuestros bosques. Protegerlos es, por lo tanto, más que una obligación, es un tributo a la rica biodiversidad que tenemos en Hidalgo.