El puente atirantado de Pachuca está en su última fase de construcción, según dio a conocer el gobernador Omar Fayad.
Esta obra, que ha pasado a la fama por sus retrasos más que por su magnitud, se encuentra en un 98 por ciento de avance físico a decir del mandatario, quien supervisó los trabajos el fin de semana.
«Ha sido un reto el poder concluir esta magna obra, debido a que no teníamos antecedentes de tal magnitud de construcción. Desde los tensores de Francia, el acero nacional, pasando por el cemento hidalguense, estamos dando pie a un hito que marca lo que queremos demostrar al mundo: que los hidalguenses somos grandes, fuertes y podemos ante cualquier reto«, aseguró Fayad Meneses en sus redes sociales.
El puente atirantado será la culminación de la modernización de la Supervía Colosio y los distribuidores viales del bulevar Felipe Ángeles. En unas semanas será abierta la circulación en el paso elevado, pero aún faltará la rehabilitación de la zona de la glorieta.