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Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

En un entorno rocoso y árido, en lo profundo de una cañada de Tecozautla, se encuentran los manantiales de Taxidhó, un bello lugar de Hidalgo que invita a sumergirse.

Se trata de un parque ecoturístico, con aguas termales que brotan a 38 grados para deleite de los amantes del turismo acuático y excelente para visitar en familia.

El río alimentado por los manantiales crea pozas naturales ideales para darse un chapuzón. También hay senderos entre el paisaje semidesértico que permiten apreciar la vegetación compuesta de órganos, cactus y biznagas característicos de la zona.

Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

Servicios

En el lugar puedes encontrar una tienda, un área para acampar, una zona verde, estacionamiento, baños, alimentos y renta de mobiliario y asadores, además de venta de trajes de baño y de inflables.

En el parque acuático hay personal y cámaras de vigilancia para mayor seguridad.

Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

Precios

El precio de entrada es de 70 pesos por auto y no hay costo por nadar en los manantiales.

Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

Cómo llegar

Manantiales de Taxidhó se ubica en el municipio de Tecozautla, casi en los límites con Querétaro. Para llegar hay que trasladarse desde el centro de Tecozautla hacia la comunidad de El Riito. En el entronque de El Riito se da vuelta a la izquierda, para pasar el puente de la comunidad de El Paso, y más adelante se llega a la comunidad de Manguaní.

Manantiales de Taxidhó, un paraíso que surge en el paisaje árido de Hidalgo

Justo al final del camino se encuentra la entrada a los Manantiales de Taxidhó, donde hay que bajar a pie o en auto el camino que lleva a lo profundo de la barranca.

Este es otro bello lugar de Hidalgo al que debemos respetar, no maltratando y no dejando basura. ¡Vívelo!

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