Enclavado en la sierra de Hidalgo se encuentra la laguna de Atezca, en el corazón del municipio de Molango de Escamilla.
Este pequeño cuerpo de agua es singular por su belleza, es alimentado por cinco riachuelos y está rodeado de un ecosistema con bosque de coníferas siempre verde, gracias al clima húmedo que prolifera en la región.
La palabra Atezca es una compuesto Náhuatl proveniente de atl ‘agua’, y tezcatl ‘espejo’, y se puede traducir como, ‘espejo de agua‘. En el centro tiene un bello islote que es hogar de algunas aves y al que se puede acceder en lancha.
La laguna cuenta con una varias leyendas, entre ellas la de la Sirena: se dice que hace mucho tiempo, un pescador que acostumbraba ir a diario a la laguna tenía por hija una hermosa joven que siempre lo acompañaba. Cierto día la joven, conoció a un guapo caballero, del cual se enamoró. A pesar de su amor, la muchacha no pudo resistir la tristeza por la oposición de su padre a la relación, por lo que una fría noche se metió a la laguna y se fue nadando hasta la isla que se encuentra en el centro, desde entonces nunca se le volvió a ver.
Los lugareños afirman que la hermosa joven se convirtió en una sirena, que con su canto hechiza a los hombres que le gustan y se atreven a nadar en la laguna, capturándolos para llevarlos consigo hasta el fondo. Desde entonces, las noches después de que alguien pierde la vida en la laguna, se escucha el canto de la bella sirena.
La laguna se encuentra a seis kilómetros de la cabecera municipal. Para llegar hay que tomar la carretera Pachuca-Huejutla hasta Molango, ahí se toma el camino que lleva al poblado de Atezca. La entrada es libre y se pueden hacer actividades ecoturísticas y de campamento.