El poder de una llamada al 911 quedó demostrado una vez más cuando policías municipales, adscritos a la Dirección de Prevención del Delito, rescataron a un niño de cuatro años que estaba siendo víctima de maltrato en Pachuca.
Gracias a la valiente acción de una denunciante anónima, se evitó que la situación empeorara, permitiendo la intervención rápida y efectiva de las autoridades.
Abandonado y agredido
Según el informe inicial, el menor era constantemente dejado solo por horas prolongadas y sufría agresiones físicas por parte de su cuidadora. Tras recibir el reporte, los agentes tomaron contacto con la informante, quien manifestó que había visto al niño llorando cerca de su domicilio.
Sin perder tiempo, los policías encontraron al niño solo y lo trasladaron a las instalaciones de la secretaría para su resguardo.
Acciones inmediatas por la protección del niño
Bajo el cuidado de la unidad de primer contacto del DIF municipal, se realizó una inspección médica del menor. El equipo multidisciplinario, tras evaluar la situación, determinó que era necesario proceder legalmente. Así, se dieron los pasos necesarios para abrir una carpeta de investigación por el delito que resulte en agravio del menor, trasladando el caso al ministerio público adscrito al Hospital General.
Un llamado a la ciudadanía
La policía municipal hizo un ferviente llamado a la ciudadanía para actuar de manera inmediata ante cualquier acto que vulnere los derechos de niñas, niños o adolescentes. Instaron a informar enseguida a las autoridades para que puedan intervenir prontamente y proteger a quienes no pueden defenderse solos. La intervención ciudadana y la acción rápida de los policías subrayan la importancia de una comunidad solidaria en la lucha contra el maltrato infantil.