Este martes 7 de mayo marca el Día Mundial del Asma, una oportunidad para concienciar sobre los riesgos y el impacto de esta enfermedad en la salud pública.
El asma es la enfermedad respiratoria crónica más común en todo el mundo, afectando a personas de todas las edades.
Comprender el Asma: Síntomas y Estadísticas
El asma se caracteriza por episodios recurrentes de sibilancias, dificultad para respirar, opresión en el pecho y tos de intensidad variable. Es una condición congénita, lo que significa que las personas nacen con ella. De hecho, alrededor del 80% de los adultos que padecen asma experimentaron síntomas desde temprana edad, antes de los cinco años.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2019 había 262 millones de pacientes con asma en todo el mundo, y se estima que causó 455,000 muertes. En México, durante 2022, se registraron 137,042 casos de asma en todo el país. Los grupos más afectados fueron los niños de 5 a 9 años, representando el 19.6% de los casos, seguidos por el grupo de 25 a 44 años, con un 17.5%.
Controlar el Asma: Recomendaciones y Acciones
El manejo adecuado del asma es crucial para evitar discapacidades y reducir el impacto económico tanto para los pacientes como para el sistema de salud. El control deficiente de la enfermedad aumenta la frecuencia de hospitalizaciones, el ausentismo escolar y laboral, y deteriora la calidad de vida de los afectados.
Expertos de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) identifican varios factores predisponentes para el desarrollo del asma, como la atopia, la rinitis, la hiperreactividad bronquial, la exposición al humo de tabaco y las infecciones respiratorias recurrentes.
Los desencadenantes comunes de una crisis asmática incluyen el humo de cigarrillo, las emociones fuertes, los cambios climáticos, el pelo de las mascotas, el polvo, el moho, el polen y la contaminación ambiental.
La SSH hizo un llamado a la población para seguir estas recomendaciones:
- Acudir regularmente a la unidad médica si se presentan síntomas de alergia.
- Evitar la inhalación de humo de tabaco.
- Alimentarse correctamente.
- Realizar actividad física de forma regular.
- Controlar el sobrepeso y la obesidad en la unidad de salud.
- Seguir el tratamiento al pie de la letra y vacunarse contra la influenza y el neumococo si se tiene asma.
- Buscar atención médica inmediata en caso de una crisis asmática.